VALENCIA, 19 ABR. (AVAN-AUDIO).- La comunidad de las Siervas del Hogar de la Madre en la localidad valenciana de Torrent ha lamentado hoy “profundamente” la pérdida de las seis religiosas de la misma congregación en Playa Prieta, en la ciudad ecuatoriana de Portoviejo, cerca del epicentro del terremoto que el pasado sábado asoló la zona costera del país.

Por ellas y por las demás víctimas han rezado “de forma ininterrumpida desde la madrugada del domingo”, según ha indicado hoy a la agencia AVAN la superiora Zdenka María del Crucificado.

Las fallecidas a consecuencia del seísmo son “la hermana Clare Crockett, irlandesa de 33 años, cuatro postulantes ecuatorianas -Jazmina, Mayra, María Augusta, de alrededor de 20 años, y Valeria, de 15 años- así como Catalina, ecuatoriana de 21 años, que estaba preparándose para ser candidata a entrar en la comunidad”, ha añadido la religiosa.

Además, ha confirmado que mañana, miércoles, a las 19.30 horas, participarán en la misa funeral por las víctimas del terremoto organizada en la parroquia de San Dionisio y San Pancracio de Valencia.

En Torrent “todas conocíamos a la hermana Clare, era muy alegre, tenía el don de alegrar a los demás, hacía reír a todo el mundo y era de esas personas que, si has tratado con ella, se te queda grabada su forma de ser, algo que nos están contando personas nos mandan el pésame”, según la superiora, que coincidió durante el noviciado con la religiosa irlandesa.

La congregación “está muy unida y todos los domingos hacemos una reunión conjunta por internet en la que participan todas las comunidades, por eso mantenemos contacto entre todas, y también con las hermanas de Ecuador”.

Jazmina, una de las jóvenes fallecidas, “pedía ser siempre fiel al Señor”

El día del terremoto las once religiosas de Playa Prieta quedaron atrapadas bajo los escombros de la comunidad, en el segundo piso del colegio “Sagrada Familia” que administran, donde atendían a más de 400 escolares que en esta época están de vacaciones.

En la madrugada del domingo “recibimos una llamada desde la Casa Madre de la congregación, en Cantabria que se puso en contacto con todas las comunidades para pedirnos que rezáramos por las hermanas en Ecuador”, ha precisado.

Desde ese momento “bajamos a la capilla y rezamos durante horas, de forma ininterrumpida”, mientras recibían noticias del rescate con vida de dos candidatas, Guadalupe y Mercedes, y de tres hermanas, Estela Morales, Thérese Ryan y Merly Alcybar, “hasta que, finalmente, a las ocho de la tarde del domingo el padre Rafael Alonso, fundador de la congregación, nos comunicó por Internet que había sido encontrado el cuerpo sin vida de Jazmina”.

Asimismo, en esta misma reunión “escuchamos el testimonio de una novicia ecuatoriana en la Casa Madre a la que, hace poco en su cumpleaños, llamaron las jóvenes de Playa Prieta, entre ellas Jazmina, que le pidió que rezase para ser siempre fiel al Señor y ser una santa sierva”, según la superiora, que ha destacado que “a nosotras, en Torrent, nos parece bonito pensar que el Señor le ha dado la fortaleza para ser fiel hasta el final y se la llevó con Él”.

Igualmente, la comunidad de Torrent también pasó la noche del domingo al lunes rezando “para que las demás hermanas aparecieran con vida y, si no era así, para que el Señor las acogiera, hasta que nos llamaron para comunicarnos que habían aparecido muertas”.

Con vida entre los escombros, con el Santísimo Sacramento en las manos

Además, en la página web de la congregación (www.hogardelamadre.org) explican que una de las supervivientes, la superiora de la comunidad en Playa Prieta, Estela Morales, española y de 40 años, “al sentir el terremoto corrió a rescatar al Santísimo Sacramento en la capilla y cuando ya lo tenía, todo se desplomó a su alrededor, cayendo hasta el piso inferior, donde la rescataron con vida con el Santísimo en sus manos”, ha confirmado la hermana Zdenka.

También entre los escombros “apareció la imagen de la congregación, de la Virgen de El Carmen, que es de escayola, pero lo asombroso es que estaba intacta, no estaba rota”.

Religiosas de otras comunidades, con las familias de las fallecidas

Las religiosas y voluntarios de las otras dos comunidades de las Siervas del Hogar de la Madre en Ecuador, en Guayaquil y en Chone, “también ayudaron, durante 48 horas, en las labores durísimas de búsqueda entre los escombros y atendieron a las familias de las candidatas desaparecidas que después hallaron muertas”, ha señalado.

Asimismo, “las religiosas rescatadas con vida, que estando entre escombros se animaban entre sí rezando y cantando al Señor, fueron trasladadas en coches a la ciudad de Guayaquil, a 200 kilómetros, con la ayuda de las religiosas de las otras comunidades, donde fueron atendidas y recibieron el alta horas después”, tal como relata la web de la congregación.

La comunidad de Playa Prieta, además del trabajo en el colegio, “realizaban a diario una importante labor humanitaria y de evangelización, que se había multiplicado en los días precedentes al seísmo a causa de las fuertes inundaciones que habían ya devastado la zona, dejando a numerosas familias en una situación de total desprotección”, indica la web.

Por su lado, la congregación de Siervas del Hogar de la Madre, que está presente en la diócesis de Valencia desde 2011, cuenta en la actualidad con cinco religiosas en Torrent, tres de ellas de Estados Unidos, además de la superiora, nacida en República Checa, y la hermana Ruth. Se dedican a la atención de enfermos en hospitales y colaboran en la parroquia de San Juan Bosco con la catequesis de adultos y oratorios para niños.

(En las fotografías, remitidas por la congregación Siervas del Hogar de la Madre, imágenes de archivo de las postulantes Catalina, Valeria, María Augusta, y Mayra -arriba-, hermana Clare -en el centro- y la joven postulante, Jazmina, abajo)

Fuente original: http://www.archivalencia.org/contenido.php?a=6&pad=6&modulo=37&id=13617&pagina=1

Por Prensa