El actor americano, protagonista de algunas películas tan galardonadas y reconocidas como Titanic, Infiltrados o Shutter Island entre otras, tuvo un encuentro privado con el máximo representante de la Iglesia en la capital romana donde el actor de 41 años de edad acudió para encontrarse con el argentino.

Pese a nacer en California, Leonardo Di Caprio reconoce tener ascendencia napolitana, y su última visita a la capital italiana le llevó a verse con el Santo Padre.

En el habitual intercambio de regalos, el actor regaló al Papa un libro de reproducciones de obras del pintor del siglo XV Jheronimus Bosch «El Bosco» mientras que el argentino le dio al actor una copia de cuero de su encíclica Laudato Si, un texto en el que el Pontífice hace un llamado a los gobiernos para que actúen para detener el cambio climático y la destrucción del medio ambiente.

Tras el encuentro, el actor reconoció sentirse muy afortunado por el encuentro privado con el máximo responsable de la Iglesia al que le agradeció personalmente su recepción.

Cabe recordar que el actor es además una persona muy preocupada por el mundo tal y como muestra su recientemente donación 15 millones de dólares para proyectos ambientalistas. De hecho, el americano hace unos días fue premiado en el marco del Foro Económico Mundial en Davos por su activismo en ese campo.