El Papa Francisco aprovechó su visita a Chiapas para pedir perdón a los indígenas por los daños sufridos por sus ancestros en una emotiva misa que el máximo representante celebró en el sur de México.

Y es que, el argentino no tuvo inconveniente alguno en reconocer que «muchas veces, de modo sistemático y estructural, sus pueblos han sido incomprendidos y excluidos de la sociedad, y algunos han considerado inferiores sus valores, su cultura y sus tradiciones”.

Por ello, el Papa admitió sentir una “gran tristeza” e invitó al mundo a “hacer un examen de conciencia y aprender a decir: ¡Perdón!”.

A la misa acudieron miles de indígenas vestidos con sus coloridos vestuarios donde pudieron ver como el Santo Padre llegó incluso a pronunciar palabras en una lengua autóctona de la región en San Cristóbal de las Casas.

El Papa también quiso en su discurso reconocer algunos de los grandes abusos de poder que muchos indígenas han sufrido en sus vidas a lo largo de la historia ya que según admitió “otros, mareados por el poder, el dinero y las leyes del mercado, los han despojado de sus tierras o han realizado acciones que las contaminaban”.

De esta forma, una vez más el máximo representante tuvo palabras de acercamiento y reconocimiento para lo que han sufrido los indígenas a lo largo de la historia y para los cerca de 100.000 personas que se dieron cita en la misa que tuvo lugar en el corazón indígena de Chiapas.