Santa Ana y la Virgen Niña (Morón de la Frontera)Iglesia del antiguo Hospital de San Juan de Dios, Morón de la Frontera.
Con motivo de la fiesta de Santa Ana y San Joaquín, padres de la Virgen María y abuelos del Niño Jesús, traemos hoy a nuestra sección la magnífica escultura que se encuentra en la antigua iglesia del Hospital de San Juan de Dios de Morón de la Frontera, que nos muestra a la Madre de la Virgen como su maestra.

Si bien aparecía ya en diversos apócrifos, en los siglos XVII y XVIII en que resurge la devoción a la Madre de María se le comienza a presentar como maestra de su Hija para mostrar esta escena como ejemplo y modelo de la difusión de la cultura y la ciencia, además de santificar la enseñanza y el aprendizaje, especialmente de las niñas, constituyéndose así en reflejo de la sociedad ilustrada del momento. Francisco Pacheco en su Arte de la Pintura recordará que es una iconografía controvertida, ya que algunos autores defendían el conocimiento infuso de la Madre de Dios, si bien la Virgen “se llegaría a pedirle lección, y querría que pareciese que la enseñaba, por hacer aquel acto de humildad y atribuir aquella gloria a su madre”. Sin olvidar que el libro es el atributo iconográfico que simboliza la transmisión de la fe, igualmente este tema puede interpretarse como Santa Ana mostrando a la Virgen las profecías de la Sagrada Escritura que se refieren a la Madre del Mesías.

Este conjunto que se encuentra en la iglesia del antiguo Hospital de San Juan de Dios de Morón de la Frontera es obra del escultor José Montes de Oca, como quedó comprobado tras la restauración que se realizó en el IAPH en el año 2006, en el transcurso de la cual se encontró dentro de la imagen de la Virgen un documento dirigido a este artista fechado en 1724.

Con una composición piramidal, aparece la Madre de la Virgen sentada en un sillón sujetando con su mano izquierda un libro que es leído con atención por la Virgen Niña, mientras que, con un gesto de cariño y protección, pasa su brazo derecho tras su Hija, la cual aparece vestida con los colores concepcionistas, túnica blanca y manto azul, sobre el que se derrama su amplia melena. La Santa por su parte lleva túnica azul oscuro, manto ocre y cubre su cabeza con un velo blanco. Hay que destacar el estofado de las vestiduras de ambas figuras, así como la belleza de los dos rostros, contrastando la madurez y serenidad de la madre con la hermosura infantil de la Hija y la elegancia de todo el conjunto.

Estas imágenes de Morón, que muestran la influencia de la obra de Martínez Montañés en Montes de Oca, se han relacionado con las del mismo tema que se encuentran en la Iglesia Colegial del Divino Salvador de Sevilla, por su gran similitud.

Antonio R. Babío, delegado diocesano de Patrimonio Cultural. 

Fotografía cedida por la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Morón de la Frontera

Fuente original: https://www.archisevilla.org/santa-ana-y-la-virgen-nina-moron-de-la-frontera/

Por Prensa