VALENCIA, 22 JUL. (AVAN).-El Curso de Verano de Medicina de la Universidad Católica de Valencia, “San Vicente Mártir” (UCV) ha celebrado hoy su jornada de clausura, en el Centro de Investigación Príncipe Felipe, en la que a lo largo de la mañana, el actor y mimo Carles Castillo ha impartido el taller de comunicación “Saber escuchar, entender y reaccionar” para ayudar a los asistentes al curso en la relación con los pacientes y a aprender a dar malas noticias.

Castillo, presidente de la asociación ImproAsistencia, dedicada desde hace diez años a atender a enfermos terminales y sus familiares en centros hospitalarios como el IVO o La Fe, ha lamentado que en ocasiones el médico le diga al paciente el diagnóstico y las pautas a seguir “de sopetón”, de una manera demasiado directa.

“Hay algunos pacientes que lo quieren así, pero la mayoría llegan dudas y confusión, además de miedo y por eso, el profesional ha de saber decir las cosas poco a poco, hacer la verdad más soportable ya que no decirlo todo en una primera sesión no es mentir”, ha aducido.

Según su experiencia con ImproAsistencia, Castillo ha aseverado que la “escucha”  es lo más importante en la comunicación de una mala noticia y en la comunicación, en general, con un paciente. “El médico debe observar bien a la persona que tiene en frente, mirarle a los ojos, e intentar percibir su estado de ánimo, si está nervioso, inquieto, temeroso o relajado”.

En ese sentido, Castillo ha asegurado que la improvisación ayuda a los médicos en la comunicación de malas noticias justamente porque su “base” es la escucha.

Crear el ambiente adecuado

El profesional ha de crear un ambiente para que el paciente y su acompañante puedan hablar “del modo más tranquilo posible”. Esto hoy es más difícil porque por “tiempo y recursos”, estas conversaciones tienen lugar en la consulta de un hospital o centro de salud, “con prisas por atender al siguiente”, ha expuesto.

Castillo ha remarcado que los médicos reconocen “su necesidad de comunicar mejor”, sobre todo los más jóvenes. “Acabamos de dar unas sesiones de improvisación durante cuatro semanas a médicos residentes y están muy contentos con lo aprendido, era justo lo que necesitaban”.

En opinión del actor valenciano, la gente mayor “es mucho más capaz de aceptar los diagnósticos y su serenidad y ánimo positivo posee razones obvias ya que no existen las cargas familiares y laborales de antes”. (AVAN)

Fuente original: http://www.archivalencia.org/contenido.php?a=6&pad=6&modulo=37&id=14173&pagina=1

Por Prensa